jueves, 31 de diciembre de 2009

FELIZ 2010

Desde la Junta de Gobierno de la Real e Ilustre Hermandad de Nuestra Señora de Guaditoca, Patrona de Guadalcanal, deseamos a todos nuestros Hermanos y visitantes de este sitio web un Feliz y Próspero 2010.

lunes, 28 de diciembre de 2009

Misa de Navidad

El pasado domingo 27 de Diciembre se celebró en el Santuario de Nuestra Señora de Guaditoca la Santa Misa de último de mes, coincidiendo con la celebración de las fiestas navideñas, por lo que tuvo un marcado carácter festivo y de Navidad en estas fechas entrañables que estamos celebrando.

La Santísima Virgen de Guaditoca, Patrona de Guadalcanal, esperaba a todos sus hijos y devotos vestida de Reina (una tradición que va tomando forma en los últimos años coincidiendo con la Santa Misa que se celebra en Navidad) y con el Niño Bellotero en Sus Brazos. Lucía la llamada saya "del púlpito" y el manto morado de terciopelo, la corona de Seco Velasco y una mantilla por la Cabeza. El templete se encontraba exornado con frutas y hortalizas, así como pino y madroños, fruta típica de la época de Navidad.

El mismo exorno lucía el Santuario, uniendo flores de pascuas y piñas en las jarras del altar. A los pies de la mesa de Altar se encontraba entronizado el Niño Jesús en una cuna, al que todos los presentes adoraron tras finalizar la santa misa, presidida por nuestro párroco y cantada por el Coro Romero "Nuestra Señora de Guaditoca".


Previo a esta Eucaristía tuvo lugar el Recital de Villancicos del Coro de Voces Blancas de la Escuela de Música "Vicente Amigo" de Guadalcanal, acompañados también por la Banda Infantil de dicha escuela de música.
Fue por tanto una mañana muy navideña y entrañable en torno a Nuestra Patrona. Ofreceremos una amplia galería de fotos del Recital de Villancicos durante esta semana.

sábado, 26 de diciembre de 2009

Cambio de última hora en el horario del Recital del Domingo

El recital de Villancicos con el que nos deleitarán el Coro de Voces Blancas de la Escuela de Música de Guadalcanal y la Banda Infantil de la citada escuela tendrá lugar a las 12 de la mañana en el Santuario de Nuestra Señora de Guaditoca el próximo domingo 27 de Diciembre, y no tras la Santa Misa que se celebrará a la 1 de la tarde como estaba previsto.

viernes, 25 de diciembre de 2009

Santa Misa de Navidad y Recital de Villancicos

El próximo domingo 27 de Diciembre tendrá lugar, como cada último domingo de mes, la Santa Misa en el Santuario de Nuestra Señora de Guaditoca. Dará comienzo a las 13.00 horas y estará presidida y predicada por nuestro Párroco Don Juan Carlos De la Rosa Egea, y cantada por nuestro Coro Romero "Nuestra Señora de Guaditoca".

Dadas las fechas en las que estamos la Eucaristía tendrá un marcado carácter navideño, y antes de la Santa Misa, a las 12 de la mañana, el Coro de Voces Blancas de la Escuela de Música "Vicente Amigo" de Guadalcanal ofrecerá, conjuntamente con la Banda de Música Infantil, un recital de Villancicos para deleite de todos los presentes.

Esperamos la asistencia de todos nuestros Hermanos y Devotos de Nuestra Patrona.

martes, 22 de diciembre de 2009

¡¡ FELIZ NAVIDAD !!


Con nuestros mejores deseos de Paz, Amor y Felicidad aprovechamos el Nacimiento del Hijo de Dios en nuestro corazón para desearte que pases una muy Feliz Navidad y que el próximo año 2010 sea próspero y feliz para todos.


La Junta de Gobierno de la Real e Ilustre Hermandad de Nuestra Señora de Guaditoca, Patrona de Guadalcanal. Navidad 2009.

lunes, 14 de diciembre de 2009

CAPÍTULO VII: 1ª Parte

El caudal de nuestra señora de Guaditoca en el siglo XVIII.- Inventario de las alhajas de la Virgen.- Fincas y edificios de su propiedad.

Cual fuera la situación de Santuario y sus riquezas al mediar el siglo XVIII, nos lo manifiestan cumplidamente los inventarios que por este tiempo se hicieron.
Mandó hacer el de alhajas, por auto de 30 de Marzo de 1748, el Vicario general de la provincia de León D. Diego Gómez de Tena, estando en Santa Visita en la Villa, “mediante ser preciso nombrar persona que administrase los caudales de la Virgen, interin que la parte a quien tocaba la dicha administración, conforme a la Real Cédula de concesión del patronato a D. Alonso Ortega, obtenía Real Carta” dio comisión al notario Juan Gallego, y previno a la Marquesa viuda pusiese de manifiesto las que fuesen, y lo mismo mandó a cualquier otra persona en cuyo poder se encontrasen.
En el mismo día se personó el Notario en el palacio de la Marquesa, y con toda diligencia se hizo el inventario siguiente:
“Lo primero se pone la corona de Nuestra Señora de plata, y pesó treinta y seis onzas y algo más.
Se pone la media luna de plata, que pesó quince libras que son doscientas y cuarenta onzas cumplidas.
La lámpara de plata, que pesó quince libras que son doscientas y cuarenta onzas.
Cuatro piñas, cuatro vasos, una flor de azucena de plata para las andas de Ntra. Señoras, que todo pesó sesenta y dos onzas.
Una chapa de plata para las andas que pesó veinte onzas.
Dos cruces de plata y un copón que pesaron cuarenta onzas.
Dos cálices, el uno dorado por fuera y dentro, con sus patenas y cucharitas, que ambos pesaron cincuenta onzas.
Una venera, la misma que el Sr. Marqués difunto dejó a Ntra. Señora, del hábito de Santiago, guarnecida de diamantes puestos sobre plata.
Un águila de dos cabezas con su corona de filigrana de oro toda guarnecida de perlas.
Un relicario de la Corona y Clavos de Cristo Redentor nuestro con su lazo de filigrana de oro y el Relicario guarnecido también de perlas.
Una saya de filigrana de oro cubierta de piedras verdes que demuestran no ser finas.
Otro relicario con la imagen de Ntra. Señora por una parte; y por la otra con la de San Juan y el Cordero, guarnecido de filigrana de oro con perlas y algunas perlas verdes.
Un anillo de oro con una esmeralda.
Otro anillo con nueve esmeraldas.
Otro anillo con siete diamantes.
Otro anillo con dos rubíes y una piedra azul.
Otro anillo con otra esmeralda.
Otro anillo con un diamante y dos puntas de diamante.
Otro anillo con tres esmeraldas, también de oro.
Otro anillo con ocho piedras azules.
Una cestita de plata de la mano del niño Bellotero.
Un vestido del niño Bellotero de tapiz morado con una cruz de cristal; otra Cruz con un crucifijo de plata sobredorada de tres esquinas y con su rótulo que dice INRI.
Dos joyas de cristal, la una con su cadenita de plata.
Dos campanitas de lo mismo, con sus cadenillas, la una sobredorada.
Una calabacita de cristal guarnecida de plata de filigrana; y otros diferentes relicarios y dijes, que estos son siete; todos pendientes con sus lazos encarnados del vestido del Niño.
Otro vestido del Niño Bellotero de tela de plata campo pajizo con flecadura de hilo de plata.
Otro vestido del Niño de tela de plata encarnada con galón de plata, todo guarnecido y con su fleco de hilo de lo mismo.
Cuatro vestidos del Niño que tiene Nuestra Señora en las manos correspondientes a sus vestidos.
Un vestido de Ntra. Señora de tela de plata encarnado.
Otro también de tela azul.
De tapiz morado otro, guarnecido con franja de plata.
Un manto de tela blanco con galón de oro.
Otro vestido viejo también de tela encarnada, a excepción de las mangas, que está en la Ermita desechas para el adorno de Nuestra Señora.
Trece lazos encarnados para la Virgen.
Setenta y cinco flores de seda grandes y pequeñas.
Una casulla de persiana encarnada.
Otra de medio tapiz con su cenefa de terciopelo encarnado.
Una casulla y dalmáticas encarnadas de raso ordinario con su galoncito dorado.
Un paño de facistol encarnado de tela, también viejo.
Una sobremesa de tisú encarnado con su galón de plata.
Un frontal de damasco encarnado con su fleco y galón de oro.
Otro frontal también de damasco encarnado con su flecadura de seda.
Dos frontales para los colaterales de medio tapiz con su puntilla de seda.
Dos estandartes, uno de Ntra. Señora azul con su Imagen; y otro de tafetán blanco del Niño con su escudo.
Un velo de Ntra. Señora, de seda listado con su cenefa de otro color.
Cuatro fundas de palos de andas de tela verde, ya viejas.
Cinco paños de cálices de diferentes colores todos de seda.
Seis bolsas de corporales de diferentes colores.
Ocho hijuelas de diferentes colores.
Cuatro hijuelitas para sobre las patenas y una mucetita para el copón.
Cuatro palias para los altares; son cinco.
Cuatro amitos con sus cintas.
Cinco albas de lienzo, excepto la una que es de bretaña.
Dos camisas de Ntra. Señora, la una nueva y la otra servida.
Unas enaguas de Ntra. Señora, de holanda nueva.
Siete cornialtares y quince purificadores.
Cinco pares de corporales.
Una toalla para que se limpien los Sacerdotes.
Dos pares de vuelos y dos vuelillos de Nuestra Señora.
Una camisa del Niño Bellotero. Cuatro cíngulos de seda.

viernes, 4 de diciembre de 2009

La definición dogmática de la Inmaculada Concepción


El Papa Pío IX, de feliz memoria, se decidió a dar el último paso para la suprema exaltación de la Virgen, definiendo el dogma de su Concepción Inmaculada. Dícese que en las tristísimas circunstancias por las que atravesaba la Iglesia, en un día de gran abatimiento, el Pontífice decía al Cardenal Lambruschini: «No le encuentro solución humana a esta situación». Y el Cardenal le respondió: «Pues busquemos una solución divina. Defina S. S. el dogma de la Inmaculada Concepción».
Mas para dar este paso, el Pontífice quería conocer la opinión y parecer de todos los Obispos, pero al mismo tiempo le parecía imposible reunir un Concilio para la consulta. La Providencia le salió al paso con la solución. Una solución sencilla, pero eficaz y definitiva. San Leonardo de Porto Maurizio había escrito una carta al Papa Benedicto XIV, insinuándole que podía conocerse la opinión del episcopado consultándolo por correspondencia epistolar... La carta de San Leonardo fue descubierta en las circunstancias en que Pío IX trataba de solucionar el problema, y fue, como el huevo de Colón, perdónese la frase, que hizo exclamar al Papa: «Solucionado». Al poco tiempo conoció el parecer de toda la jerarquía. Por cierto que un obispo de Hispanoamérica pudo responderle: «Los americanos, con la fe católica, hemos recibido la creencia en la preservación de María». Hermosa alabanza a la acción y celo de nuestra Patria.

Y el día 8 de diciembre de 1854, rodeado de la solemne corona de 92 Obispos, 54 Arzobispos, 43 Cardenales y de una multitud ingentísima de pueblo, definía como dogma de fe el gran privilegio de la Virgen:
«La doctrina que enseña que la bienaventurada Virgen María fue preservada inmune de toda mancha de pecado original en el primer instante de su Concepción por singular gracia y privilegio de Dios omnipotente, en atención a los méritos de Jesucristo, Salvador del género humano, es revelada por Dios, y por lo mismo debe creerse firme y constantemente por todos los fieles».
Estas palabras, al parecer tan sencillas y simples, están seleccionadas una por una y tienen resonancia de siglos. Son eco, autorizado y definitivo, de la voz solista que cantaba el común sentir de la Iglesia entre el fragor de las disputas de los teólogos de la Edad Media.


Tratado popular sobre la Santísima Virgen; Parte III, Cap. V: Historia del dogma de la Inmaculada Concepción.

lunes, 30 de noviembre de 2009

"La vida de María". Cap. tercero: "Padres y Familia"

Sobre sus padres, la Iglesia Católica ha tomado los nombres de Joaquín y Ana como los de sus progenitores, pero no se sabe a ciencia cierta sus nombres verdaderos, los que existen son tomados del Protoevangelio de Santiago, uno de los evangelios apócrifos más famosos y tomado como referencia para muchos datos piadosos sobre la vida de la Virgen María.
No se tiene seguridad de si María tuvo hermanas, aunque la duda subsiste por ciertos datos del evangelio de San Juan y San Mateo quienes mencionan a una "hermana de su madre" quien sería María de Cleofás;
Hegesipo menciona a esta María como esposa del hermano de José y por tanto cuñada de María pero no elimina la posibilidad de ser su hermana.
En el Nuevo Testamento, aunque en algunos pasajes se habla de hermanos de Jesús sólo dice que María es la madre de Jesús. La
Iglesia Católica, la Iglesia ortodoxa y la Iglesia Copta, basadas en el uso del lenguaje hebreo de aquella época y en la tradición eclesial, interpretan este término como parientes, y declara que María permaneció siempre virgen. La mayoría de las confesiones protestantes (con excepciones como los luteranos y la Comunidad anglicana), por su parte, dicen que María, después de la concepción virginal, tuvo otros hijos.
Los que afirman que María tuvo otros hijos, basan su argumentación en la interpretación literal de los textos bíblicos en los que se habla expresamente de hermanos de Jesús. En el
idioma arameo así también en el hebreo no existe un término para indicar primo o un familiar cercano. Los Setentas, al traducir la Biblia hebraica al griego, cada vez que encuentran el término hermano, usan el término adelfos para indicar parientes incluso no muy cercanos. En el griego Koiné, griego coloquial de la época en que fueron escritos los Evangelios, si bien existía el término anepsios para indicar primos, no implica que su uso estuviera generalizado entre los hebreos.

jueves, 26 de noviembre de 2009

Santa Misa en el Santuario


Como cada último domingo de mes, el próximo domingo 29 de Noviembre de 2009 a las 12.30 horas de la mañana, tendrá lugar en el Santuario de Nuestra Señora de Guaditoca la Eucaristía que marcan Nuestras Sagradas Reglas que ha de celebrarse ante las plantas de Nuestra Señora cada último domingo de mes.

La misma estará oficiada por nuestro párroco Don Juan Carlos de la Rosa Egea y acompañada por los cantos del Coro Romero "Nuestra Señora de Guaditoca".

Siguiendo la tónica de los últimos meses, la Santísima Virgen se volverá a ver arropada por todos sus hijos devotos que acudirán a esta cita mensual con Nuestra Patrona.

lunes, 23 de noviembre de 2009

Capítulo VI: 2ª Parte

El Marqués pago a su hermano el alcance que arrojaba la cuenta a favor de éste; y al pie de ellas puso el correspondiente testimonio del recibo de la cantidad. “Recibí de mi hermano el Marqués de San Antonio, los trescientos y ochenta y un reales vellón que tenía suplidos en las obras que de mi orden si hicieron en la Iglesia de mi Señora de Guaditoca, como consta de la cuenta de las antecedentes. Guadalcanal y Junio 8 de 1743.- Nicolás Ortega y Tolero.”

Dejamos antes de tratar, para hacerlo ahora, de la sequía de los años de 1733 y 1734. Fueron nombrados en el primero de los citados años Comisarios: D. Andrés de Ortega, D. Cristóbal Jiménez, D. Alonso Maldonado, D. Álvaro de Ayala, D. Gómez de Córdoba y Agustín Gálvez, disponiendo la Villa por su auto de 4 de Abril “la asistencia de las Cofradías de los lugares inmediatos, a quienes se dé noticias y se despache propio.”
Nueva necesidad hubo en el siguiente año y en 30 de Marzo se acordó traer la soberana Imagen “y además de los motivos expresados para ten devoto recurso, concurre la guerra tan sangrienta entre los príncipes cristianos de Europa, debiendo todos pedir por su extinción y sosiego para la mayor exaltación de nuestra Santa fe.”

Se mandó avisar a las Cofradías de los pueblos de la comarca y nombraron los comisarios, quienes de acuerdo con D. Nicolás Ortega, convinieron en destinar las limosnas para alguna alhaja del mayor adorno y culto de la Virgen y Señora de Guaditoca.
Muy al pormenor nos cuenta D. Ignacio de Ortega lo ocurrido en la declaración que puso a continuación de las cuentas de su primo don Nicolás.

“Declaro yo D. Ignacio Ortega, vecino y regidor perpetuo de esta Villa, que por Abril de 34 hallándose el Común de esta Villa y demás sircunvencias muy aflijido con la carestía de el trigo y falta de agua, se resolvió por el Ayuntamiento de esta Villa, con dictamen de las Comunidades eclesiásticas y de D. Nicolás de Ortega Toledo, mi primo, a cuyo cargo estaba el culto de la Imagen de Nuestra Señora de Guaditoca y la Administración de sus limosnas, el traerla en rogativa a la Iglesia Mayor de esta Villa, y para sus fiestas y solicitud de las limosnas nos nombraron por comisarios a don Álvaro de Ayala, D. Alonso de Cabrera, Fernando de Gálves y a mí. Y procurando entregar el producto de las limosnas del petitorio a el dicho D. Nicolás, se convino gustoso en lo que restare, bajados los gastos, lo aplicásemos para alguna alhaja del mayor adorno y culto de Nuestra Señora; y pareciéndonos muy precisas unas andas de plata, se lo propusimos a el dicho D. Nicolás, en lo que se conformó muy gustoso; ofreciéndonos a nuestra disposición una lámpara quebrada, que tenía Nuestra Señora y las limosnas que produjesen las ferias (bajados los gastos regulares que en ellas se ofrecen) y dieren otros particulares hasta la conclusión de dichas andas, a cuya obra nos aplicamos con el mayor celo. Y con efecto recogimos en esta venida de Nuestra Señora mil ciento y treinta reales; en la feria de aquel año, libre de gastos, quinientos veinte y cinco; en el año de 35, seiscientos cuarenta y un reales; en el de 36, ochocientos diez y seis reales; en el de 37 (49), quinientos reales; en el de 38, setecientos doce reales; que todo importó 4.382 reales, con cuyo dinero y la plata de la lámpara se principiaron las andas y se hicieron cuatro columnas muy fuertes y preciosas, con una jarra en medio de ellas y una piña en el remate de cada una. Y con el motivo de haber fallecido don Alonso de Cabrera, uno de los Comisarios, y entibiado los compañeros en la agencia de las limosnas, se dió cuenta de todo a dicho D. Nicolás de Toledo, y además del estado en que dejábamos las andas y queda referido, le dejábamos a su disposición en poder de Cristóbal Trigueros, mercader de esta villa, trescientos y sesenta y seis reales en dinero, y 28 onzas de plata, pertenecientes uno y otro a Nuestra Señora; y para que conste en todo tiempo la distribución de las limosnas, que dejó a nuestro albedrío, lo firmé Guadalcanal a 15 de Junio de 1743 – D. Ignacio Ortega Ponce de León.”
La plata que estaba en poder de Cristóbal la recibió el Marqués, según anotan las cuentas de 1743. “Más es cargo cuatrocientos y veinte reales de el valor de veinte y ocho onzas de planta, que recibió mi marido de Cristóbal González mercader de esta villa, en quien las habían dejado los Caballeros comisarios, que durante su ausencia se encargaron de principiar las andas de plata para Nuestra Señora.” Al año siguiente se dieron al platero Oliveros ochocientos reales “para en cuenta de las andas de plata.”

Continuó el Marqués, a su vuelta a Guadalcanal, la obra de las andas, y “desembolsó, dice la Marquesa en el ajuste de cuentas que presentó a la Visita, mil setecientos y noventa y cinco reales, y deben abonarse para pagar ciento diez y nueve onzas y once adarmes de plata, que compró a quince reales para continuar la obra de las andas, a las que se le han puesto con ella cuatro eses, la guardilla de la cornisa por dentro, tornillos, ángeles y portezuelas, la cúpula, un ramos encima y una chapa para tapar los arcos.” Se encargó de la hechura Pedro Oliveros, Maestro platero de Llerena, quien declaró ante el escribano de la villa Miguel Jerónimo Escutia y dió carta de pago en 16 de Marzo de 1748, de haber recibido “mil doscientos treinta y ocho reales y medio y ciento diez y nueve onzas y nueve adarmes de plata... y que la hechura de todo con el gasto de barras de hierro y tornillos, y del carpintero que achicó la cornisa, importaba quinientos y noventa reales; y que rebajados de el recibo restaban en su poder seiscientos y cuarenta y ocho reales y medio, que se obligó a emplearlos en plata y en hechura de las obras de las andas, para cuyo fin se le entregaron.”

Hemos dicho que el Marqués se hizo cargo de la administración del Santuario en 1743, y siguió al cuidado de ella hasta su muerte en 1748, y de ella llevó apuntaciones en un libro del cual sacó después su viuda las partidas para formalizar sus cuentas. En esos años los ingresos rebajados los gastos, fueron los siguientes: en 1743 “habiendo fallecido el hermano José, ermitaño de Nuestra Señora, por no quedar entonces otro en la Ermita, se recogieron seis fanegas de trigo que tenía en ella, a precio de quince reales, y valen noventa”; al año siguiente quedaron en poder del Marqués “treinta y una fanegas de trigo y media, que recogió de la Ermita, por ausentarse los Ermitaños, que entonces había... y valen a razón de catorce reales, e importan cuatrocientos cuarenta y uno.” La limosna de la feria fue en 1743 de cuatrocientos noventa y cuatro reales; en 1744 de quinientos dos: en 1745 fue más crecida la limosna pues “en este año se cobraron ochocientos reales, fuera de gastos, que recibió Pedro Oliveros, platero de la Ciudad de Llerena, para en cuenta de las andas”; en el siguiente la limosna fue de 780 y por último en 1747 de 624 reales. Desde 1743 a 1747, ambos inclusive, en cada año se cobraron de la casa de la Virgen 99 reales; menos en 1746 que por haberse pagado los reparos no quedaron más que 77.

En estos años, a más de las cantidades que se dedicaron a las andas, hizo el Marqués algunos gastos de poca monta: en componer la corona de la Virgen, 28 reales; “también gastó ciento y ochenta reales en una yegua, que les compró a los ermitaños para que fuesen a recoger las limosnas por los lugares circunvecinos; más doscientos y cuarenta reales y medio en una reja que mandó traer de Sevilla, que pesa siete arrobas y se haya existente en mi poder, dice la Marquesa, para la ventana de la escalera del camarín de Nuestra Señora.”
Muy bien asistido estaba el Santuario en estos años, y a ello no dejó de contribuir la piadosa Marquesa, que con celo y largueza cuidaba de la Santa Imagen, y de todo lo concerniente al culto divino en Guaditoca: pero no se rendían cuentas, según era en deber el Marqués, y se le había preceptuado en el Real Título nombrándolo administrador.

Algunas gestiones debieron hacerse a conseguir que rindieses cuenta el Marqués, y de resultado negativo, por lo que el Vicario general de la provincia acudió al Real Consejo, recibiendo la siguiente carta de contestación:
“En carta de 8 de Enero próximo pasado de Vm. Cuenta al Consejo de que en otras ocasiones que ha visitado la Villa de Guadalcanal, se le ha dado noticia de que el Marqués de San Antonio se halla administrando, muchos años ha, el devoto Santuario de Nuestra Señora de Guaditoca, que está en término de dicha Villa, sin que en tan dilatado tiempo haya dado cuenta en la visita eclesiástica, donde corresponde, ni en otra parte, de los crecidos caudales que entran en su poder anualmente; pues aunque Vm. le ha hablado en este asunto varias veces, no ha llegado el caso de sujetarse a cuentas, valiéndose de que solo está sujeto al Consejo: y que no siendo justo que se exima a dicho Marqués de una obligación tan precisa, para saberse el estado de dichos caudales, pide Vm. al Consejo tome providencia conveniente: y en su inteligencia ha acordado diga a Vm., como lo ejecuto, que apremie al expresado Marqués a que de estas cuentas, y que de lo que resultare, dé Vm. cuenta al Consejo, y lo participo a Vm. para su cumplimiento. Dios gue. a Vm. ms. a. Madrid, 16 de Febrero de 1748.- Martín de Lezeta.”

Recibida la anterior carta el Vicario general se dispuso a cumplimentarla; y de la dificultad que surgió con la enfermedad y muerte del Marqués en aquellos días, da noticias el auto siguiente: “En la villa de Guadalcanal a veinte y un días del mes de Marzo de mil setecientos cuarenta y ocho, el Sr. Licenciado don Diego Gómez de Tena del Orden de Santiago, Vicario general, Juez eclesiástico ordinario de esta provincia, dijo que en carta-orden de diez y seis de Febrero próximo pasado, de los señores del Real Consejo de las Órdenes, se le da a su merced la conveniente para que apremiase al Marqués de San Antonio a que dé cuentas de la administración de los caudales de Nuestra Señora de Guaditoca, que ha tenido a su cargo de muchos años a esta parte, cuya Real Orden llegó a tiempo que dicho Marqués se hallaba enfermo en la cama, de cuya enfermedad falleció sin poder dar dichas cuentas; y por cuya causa no se pudo poner en ejecución la real providencia: y debiendo darlas la Marquesa viuda y heredera de dicho difunto Marqués, para que esto tenga efecto y se venga en conocimiento de el tiempo de dicha administración, mandó su merced, se haga saber a dicha heredera exhiba el título de tal administrador, y que de él se ponga copia testimoniada a continuación de este auto, y que nombre persona con poder bastante que comparezca a dar dichas cuentas en esta audiencia luego y sin dilación, respecto a estar prevenida por medio de recados, que su merced le ha mandado con el presente notario y el teniente de Cura de la Iglesia Mayor; entendida dicha Marquesa que de no hacerlo con la prontitud que corresponde, serán de su cuenta las costas y salarios que causase su detención, pues los negocios de Visita se hallan evacuados. Y por este auto así lo proveyó, mandó y firmó = Diego Gómez de Tena.- Ante mí, Juan Gallego.”

En el mismo día la Marquesa presentó el título de nombramiento de Administrador del Santuario dado por Felipe V a favor de don Alonso de Ortega, y se copió a continuación del auto, firmando la Marquesa el recibo de haberse devuelto el original: presentó también una carpeta de cuentas del tiempo que D. Nicolás fue Administrador; y en 26 de Marzo la cuenta que abarcaba desde 1725 hasta la muerte del Marqués, al pie de la cual hay el siguiente resumen y advertencia: “De suerte que estas partidas importan veinte y siete mil trescientos tres reales y veinte y seis mrs., que conferidos con los diez y nueve mil ciento y cincuenta y cuatro del cargo, restan contra el Caudal de Nuestra Señora, y a mi favor como heredera de los derechos, deudas y bienes de mi marido, siete mil seiscientos cuarenta y nueve reales, salvo error; y juro en forma de derecho haber formado esta cuenta arreglada a los papeles y gastos que hizo y dejó mi marido.
Debiendo prevenir en cuanto al cargo, que todas las limosnas que recogían los Ermitaños en dinero, aceite, granos y otras especies, fuera de la cantidad cargada en esta cuenta, las expedían y consumían ellos en su manutención, aceite para las lámparas y alguna cera para las muchas misas que en el discurso del año se van a celebrar a dicha Ermita, sin tomárseles cuenta de estas limosnas a fin de que nunca falten a la asistencia de Nuestra Señora.
Y en cuanto a la data, que en el tiempo que ha estado en mi casa el cuidado de esta Santa Imagen se ha gastado, y por mi mano, crecida cantidad de mrs. En ropa, para el mayor adorno y lucimiento de la Imagen, ornamentos y altares, y sólo hago memoria de unas camisas de estopilla, enaguas de holanda con ricos encajes, además de los que he puesto en las albas: hice dos pares de corporales; un vestido de tapiz para la Imagen y el Niño, en que se gastaron trece varas a cinco pesos, guarnecido con encaje de plata y forro de seda, habiendo puesto también los de los frontales, y dos casullas con entretelas, guarniciones y hechuras; cíngulos, bolsas de corporales, cintas, flores y otras cosas, que no tengo presente, ni he querido jamás que para ello se descontase cosa alguna de las limosnas de Nuestra Señora, a cuyo culto y mayor decencia lo he ofrecido y ofrezco de mi caudal con el mayor rendimiento y obligación.
Y lo firmé en esta Villa de Guadalcanal, a veinte y seis de Marzo de mil setecientos y cuarenta y ocho. = La Marquesa de San Antonio de Mira el Río.”

Presentó las cuentas la Marquesa con un memorial en el que reiteraba las protestas que hizo el Marqués en la primera cuenta que se le tomó, y las demás convenientes a los que sucediesen en el Patronato; y suplicaba se le aprobaran y se le pagara el alcance, que quedaba a su favor. Aprobó el Vicario general las cuentas y “mandó que del primer caudal de Nuestra Señora, se satisfaga el alcance que de dichas cuentas resulta a la parte del Administrador difunto, y a su heredera, y se le de el testimonio que pide con inserción de las cuentas y su pedimiento y de este auto.”
En el mismo día el Notario de la Audiencia, fue a comunicar a la Marquesa lo proveído por el Vicario general, y ella, generosa una vez más para con la Virgen de Guaditoca, “dijo que el alcance que a su favor resulta de las expresadas cuentas lo remite y perdona y en caso necesario lo cede a favor de nuestra Señora” y así lo firmó.




miércoles, 18 de noviembre de 2009

Estreno de "AGUA, AZUCARILLOS Y AGUARDIENTE"


El próximo sábado, a las 20.30 horas y en el Cine-Teatro Municipal de Guadalcanal se estrenará la obra de zarzuela "AGUA, AZUCARILLOS Y AGUARDIENTE", escrita por Miguel Ramos Carrión y con música de Federico Chueca. Dicha obra fue estrenada por vez primera en el Teatro Apolo de Madrid el 23 de Junio de 1897.


Y el próximo sábado llega a Guadalcanal, con motivo de la festividad de Santa Cecilia. Nuestra Banda de Música "Nuestra Señora de Guaditoca" junto con todos los colectivos y asociaciones culturales de nuestro pueblo (entre ellos el Coro Romero "Nuestra Señora de Guaditoca") han estado trabajando durante mucho tiempo para que esta obra maestra de Zarzuela sea una realidad el próximo día 21 de Noviembre en nuestro pueblo.


El estreno tendrá lugar en el Cine-Teatro a partir de las 20.30 horas, y está previsto la asistencia de numerosas personalidades de la Junta de Andalucía y de la Diputación de Sevilla, aparte de una representación de todos los Ayuntamientos de los municipios de la Sierra Norte. Todo un evento cultural que jamás se ha desarrollado en nuestro pueblo.


Desde la pasada semana se encuentran a la venta las entradas, al precio de 10 euros en el patio de butacas y a 8 euros en la zona de asientos de madera del Teatro Municipal. La misma obra será representada de nuevo el sábado 28 de Noviembre en el Teatro Municipal, para todas aquellas personas que no puedan asistir al estreno el próximo sábado.


Desde esta web deseamos a Nuestra Banda de Música, a los representantes de nuestro Coro Romero y a todos los hermanos y hermanas y guadalcanalenses en general que participan en la representación mucha suerte de cara al estreno, y antes de la representación damos la enhorabuena por el valor, el trabajo y el esfuerzo realizado al hace realidad este ambicioso proyecto nunca antes realizado en Guadalcanal. Por supuesto, no podríamos olvidar a las personas responsables del mismo, directores de la obra: Francisco Javier Carrasco Jiménez (director musical), Carmen Susana Gordón y Cristina Díaz (directoras de escena) y Mari Carmen Ruiz (directora de baile).

lunes, 16 de noviembre de 2009

"Hasta siempre, amigo Carlos" Por n.h.d. Jose Miguel García


Hasta siempre amigo Carlos.
Desde que en 1960 entró a formar parte de la congregación Franciscana, y tras 27 años de pontificado en la Archidiócesis de Sevilla, D. Carlos ha sido tan franciscano como Cardenal, tan pastor como gobernante, hombre que ha recibido a todo tipo de segmentos de la sociedad: políticos de diferentes ideologías, representantes de Colega (colectivo de gays y lesbianas), reclusos, cofrades, sindicalistas, artistas, aristócratas, etc. Negociador siempre con los políticos de turno, hasta ha casado a una Infanta.
Su homilía en el funeral de los esposos Alberto Jiménez- Becerril y Ascensión García cruelmente asesinados por la sin razón del terrorismo, dejo más que en evidencia a más de un ambiguo obispo de la zona norte de España, su comprensión a las causas de la huelga general de 2002, o sus declaraciones en contra de la guerra de Irak, escocieron y mucho al gobierno de entonces (P.P.). Hombre valiente, llano, afable y calculador.
Levantó el nuevo seminario metropolitano y construyó 30 parroquias, cediendo institucionalmente el vetusto palacio de San Telmo. Desde Sevilla, la cátedra de San Isidoro, ha sido referente mediático de todo el clero español.
Tubo como huésped dos veces a Su Santidad Juan Pablo II, aunque le concedió el Capelo Cardenalicio muy tarde. Gracias a él la organización administrativa y económica de la archidiócesis se modernizó, y en el palacio arzobispal donde había una mesa con escribanía se colocó un ordenador. Reorganizó las vicarías, dando mayor autonomía y trabajo de “campo” a los Vicarios, cuatro en la provincia y dos en la capital.
El pasado día 5 de noviembre, comunicaba su despedida y desde entonces no han dejado de correr ríos de tinta, deseándole lo mejor. Por algo será.
Como se dice aquí, en la tierra de María Santísima, Fray Carlos ¡Vaya usted con Dios¡

jueves, 12 de noviembre de 2009

Capítulo VI (1ª Parte)

Seguimos con la serie de capítulos del libro "El Santuario de Nuestra Señora de Guaditoca", que le estamos ofreciendo gracias a la gentileza de n.h.d. Jose Miguel García Gálvez.
En esta ocasión ofrecemos la primera parte del capítulo VI.

Administración del Marqués.- Obras en el Santuario.- Administración interina de D. Nicolás de Ortega y Toledo.- Dorado del retablo mayor.- Otras mejoras en el Santuario.- Necesidad de agua en 1733 y 1734.- Las andas de plata.- Orden del Consejo para que el Marqués rindiera cuentas de su administración.- Ríndelas la Marquesa por muerte del Marqués.

Cumpliendo lo dispuesto por la Real Cédula de Felipe V., se hizo cargo el Marqués de S. Antonio de todo lo referente al caudal de la Virgen de Guaditoca. De su administración desde 1722 al 1725, no queda otro vestigio que la siguiente noticia que encabeza las cuentas que rindió su viuda en 1748: “por un testimonio autorizado de Antonio Rodríguez, notario que fue en la visita eclesiástica en esta villa, en el año pasado de setecientos y veinte y cinco, su fecha en ella a dos de Noviembre, se justifica habérsele tomado al citado mi marido la cuenta del caudal de Nuestra Señoras de Guaditoca en dicho año y los dos antecedentes, de que quedó alcanzado en trescientos y cincuenta reales, como se justifica de el mismo testimonio que se pone por recado de esta cuenta.” (45)
Por necesidad de agua acordó la Villa en 28 de Abril de 1724, traer la Santa Imagen y nombró Comisarios a D. Nicolás de Ortega, D. Ignacio de Ortega, D. Fernando López de los Disantes, Cristóbal Jiménez, Fernando Gálvez y D. Cristóbal de Castilla Gorgazo.
Permaneció el Marqués en Guadalcanal, hasta el año 1732, en que se ausentó para desempeñar diversos empleos del real servicio; y ni de esos años, ni de los siguientes hasta su muerte, dio las cuentas de la administración del Santuario, las que, como diremos después, hubo de formalizar la Marquesa viuda; por éstas sabemos el estado del caudal de la Virgen y su inversión en aquellos años.
Desde 1726 a 1731, ambos inclusive, quedaron en poder del Marqués las siguientes sumas: “en el año de 1726 recibió mil doscientos cincuenta reales de la feria, después de haber pagado las asistencias de la clerecía, las memorias que se cantan en aquella Ermita, cera, cohetes y el trabajo de las personas que se nombran para cobrarlas durante los tres días de pascual.” En los siguientes años dejó la feria libre 900 reales en 1727; 1125, en el de 28; 865, en el de 29; 1200, en el de 30 y 1310 en el de 31. Las limosnas sueltas importaron en los mismos años 687 reales: y de la renta de la casa de la calle San Francisco “propia de nuestra Señora” setenta y siete reales en cada año; menos en 1728 que quedaron más que 50 después de pagar una reparación.
En estos años “hizo fabricar contra la muralla de la Ermita a la puerta de medio día y enfrente de ella muchos portales para la comodidad de los mercaderes y resguardo de sus mercadurías; y tres casillas para bibanderos y tabernas; y por no encontrar la razón del importe de estos gastos entre los papeles de mi marido, se han apreciado estas obras ahora por Agustín de Robles, Maestro alarife y examinador de la Ciudad de Llerena y valen todas 4.900 reales, como consta de su certificación que acompaña a esta cuenta.”
El reconocimiento de Agustín Robles con el aprecio de las obras es el siguiente al por menor: un portal de arcos de ladrillo, con sus tabiques dobles por delante y por los costados, de suerte que cada uno tiene su división para la comodidad de los mercaderes y sus mercadurías; enfrente de la puerta de la Ermita de Nuestra Señora de Guaditoca, a la parte de medio día y regulando su manufactura, materiales, piedras, tejas, maderos y alfajías, vale todo dos mil y cien reales.- Una casa nueva contigua a este mismo portal que tiene dos puerta y buen techo y maderaje; vale todo ochocientos y cincuenta reales.- otra casilla contra los portales antiguos cerca de los hornos de ladrillo con sus dos puertas, que todos sus materiales y manufactura valen cuatrocientos reales.- otra casilla junto a la pastelería que vale quinientos reales y los portales fabricados contra la muralla de la Ermita a la parte del sol de medio día (46) dispuestos para la comodidad de los mercaderes, valen mil y cincuenta reales. De suerte que todas estas partidas importan cuatro mil y novecientos reales, que es el justo valor de las obras.”
En estos mismos años se hicieron otras de importancia en el Templo, a saber: la construcción de bóveda de la Iglesia, el coro con la escalera de subida y el campanario; de lo cual dio Agustín de Robles la siguiente carta de pago.

“Como Maestro Mayor y Alcalde y examinador de oficio de alarifes y Maestro de obras nombrado por el Cabildo de la Ciudad de Llerena, de donde soy vecino; certifico que he recibido de el señor Marqués de San Antonio, caballero del hábito de Santiago, vecino de esta Villa de Guadalcanal, Patrono y Administrador de la Ermita de Nuestra Señora de Guaditoca en término de ella, y en diferentes partidas once mil y doscientos reales de vellón en especie de dinero; y cuarenta arrobas de vino a precio de seis reales cada una, que es lo mismo con que tomé de mi cuenta, cargo y riesgo la obra que he concluido con otros compañeros en la Iglesia de dicha ermita, siendo de mi cargo también hacer y poner todos los materiales, que se ha reducido a hacer de bóveda todo el cuerpo de la Iglesia con sus arcos y estribos correspondientes, coro, escalera y campanario; quedando a mi utilidad todas las maderas que sostenían la techumbre antigua, pues así se ajustó don dicho señor. Además del dinero del vino que antes se expresó y para resguardo de su señoría doy el presente, que firmé en Guadalcanal a veinte y cuatro de Junio de mil setecientos y veintiocho = Agustín de Robles = Son 11.400 reales.”

Importaron todas estas obras diez y seis mil trescientos cuarenta reales: y como el cargo de estos años fue de ocho mil ciento cincuenta, quedó un déficit a favor del Patrono Administrador de cinco mil ciento noventa reales.
A 23 de Febrero de 1732 salió el Marqués para Llerena a encargarse de su gobierno, para el cual había sido nombrado por S.M.; quedó, durante su ausencia, que duró hasta 1743 (47), encargado de la Administración del Santuario, su hermano D. Nicolás de Ortega y Toledo. Dejó D. Nicolás una “memoria de la cuenta que he llevado, dice, de las limosnas que he percibido de la Milagrosa Imagen, mi Señora de Guaditoca, desde Febrero del año pasado de 1732 y lo que he gastado en el adorno y culto de su Santa Casa, desde cuyo tiempo ha estado a mi cuidado, por haberse ido el Marqués de San Antonio, mi hermano, a el gobierno de Llerena el día 23 de dicho mes.” De ella tomaremos algunas noticias.
El ingreso de la feria en el año 1732, después de pagar los gastos, fue de 1.407 reales, que entregaron Andrés Blas y Francisco Robledo, a cuyo cargo estuvo la cobranza; en el siguiente entregaron los mismos 950 reales. Desde 1734 al 1738 este ingreso, como se dirá después, se dedicó a otro fin y no se incluye por ello en las cuentas de D. Nicolás. En el año de 39, los mismos comisarios entregaron 607 reales “como consta del libro que para en poder de Cristóbal González Triguero, adonde se sentaban las limosnas de todos los años”; más 36 reales que estaban en poder de este: en los años 40 y 41 corrió con las limosnas de la feria Robledo solo, y entregó respectivamente 801 y medio y 687 reales: en el año siguiente D. Juan de Ortega entregó 1.195 reales y medio.
De la casa de la calle S. Francisco se recibieron, pagados los reparos, 697 reales. También hubo un ingreso de 227 reales en dos años, por arriendo de un buey, propiedad de la Virgen, a un vecino de Almadén. Importó, pues, el cargo en los diez años 6.908 reales, sin la cantidad que se dedicó a las andas.
Durante esos años se hicieron y pagaron obras importantes en el Santuario. La cuenta que rindió D. Nicolás, al volver el Marqués su hermano a encargarse de la administración, las enumera con el coste que ocasionaron: “Se gastaron en el año 1732 dos mil y ochocientos reales vellón en el dorado del retablo de la capilla mayor, en cuya cantidad lo ajustó mi primo D. Diego de Ortega, con dos doradores de Sevilla: más se gastaron veinte y cuatro reales que se le dieron a D. Juan Pérez Carrasco para ayuda de las Misas que dijo en la Iglesia de Nuestra Señora; más se gastaron diez pesos de a ocho reales de plata para su rostrillo para la Virgen por mano de Sor Francisca de Santa Ana (48) quien lo ajustó el día 14 de Abril de 1736; más se gastaron el día 26 de Abril de 1737 tres pesos de a ocho reales de plata para comprar cuatro varas y argollas para el palio; más se gastaron siete reales que llevó el carpintero por cepillarlas, cuyas dos partidas fueron por mano de D. Ignacio de Ortega, quien compró las argollas y dichas varas; más se gastaron dos mil reales vellón en los que se ajustó el estofado de la capilla mayor con Juan de Brieva, vecino de Llerena; más se gastaron doscientos y treinta y dos reales de dos carretadas de maderos para los andamios, sogas y alfagías en el año de 1739; más se gastaron el día 18 de Abril de 1740, doscientos reales vellón en cien tablas que compré a Luis de Baena, vecino de Cazalla, quien las llevó a la casa de Nuestra Señora; más se gastaron sesenta reales vellón, el día 21 de Mayo de 1741, de un rostrillo que se hizo en Berlanga a la Virgen, y lo demás de su costo lo suplió la Cofradía de Nuestra Señora de aquella Villa; más se gastaron mil y seiscientos reales vellón que se le dieron a el dicho Juan de Brieva, a su muger e hijo José de Brieva, por haber fallecido su padre, en cuya cantidad se ajustó el estofado de dos naves de la Iglesia de Nuestra Señora con que se acabó el día último de Julio de 1741; más se gastaron siete reales vellón de dos libras de alambre para hacer una reja en la Iglesia; más se gastaron el día 26 de Enero de 1743, sesenta y cuatro reales vellón en cercar el corral de las casas de Nuestra Señora, que los ganaron Domingo el albañil y dos peones.” Importaron los gastos 7.289,26, quedando un alcance de 381,26.Hace una advertencia, después del cierre de la cuenta D. Nicolás y dice: “se previene que la nave de los colaterales la estofó el hermano José, la cual costó cuatrocientos y veinte reales, para los cuales percibió trescientos y treinta del buey que vendió en el Almadén; y así mismos costeó un retablo de los dichos colaterales que le costó seiscientos reales y el costo de traerlos ambos de Llerena: y el otro lo construyó por mi devoción y con dos becerros que a la Virgen le dí: y por ser todo cierto, según mi conciencia, así lo declaro y firmo esta cuenta en Guadalcanal a once días del mes de Marzo de 1743 años – Nicolás.”

lunes, 9 de noviembre de 2009

La Vida de María. Capítulo 2º

María es mencionada por su nombre por primera vez al escribirse el evangelio más antiguo, el evangelio según san Marcos, pero de forma tangencial. En el evangelio según san Mateo se la menciona con motivo de la narración de la concepción milagrosa de Jesús y de su nacimiento y huida a Egipto. Aquí el evangelista menciona que es María aquella de quien habló el profeta Isaías al decir: la Virgen concebirá y dará a luz un hijo a quien pondrán el nombre de Emanuel, que traducido significa: "Dios con nosotros". El evangelio según san Lucas es el que más datos da sobre María, al desarrollar con más detalle los temas de la infancia de Jesús, algunos de los cuales se amplían más abajo: la Anunciación, la Visita a Isabel, el Nacimiento de Jesús, la Presentación de Jesús en el Templo (aquí el anciano Simeón le profetiza: a ti misma una espada te atravesará el corazón, aludiendo al dolor de María durante la Pasión de su Hijo) y la pérdida de Jesús y su hallazgo en el templo. También es san Lucas quien dice que María conservaba estas cosas y las meditaba en su corazón. En el evangelio según san Juan, Jesús hace su primer milagro a pedido de ella, en Caná. Y en la cruz, la entrega como madre a san Juan mismo, y san Juan es entregado a María como hijo. La teología católica y ortodoxa destaca, a raíz del milagro de Caná, la eficacia de la intercesión de María ante su Hijo; y en la entrega al pie de la cruz, la proclamación simbólica de María como Madre de la Iglesia, es decir, de todos los cristianos, figurados en la persona de Juan. También se le menciona en los Hechos de los Apóstoles como miembro destacado de la comunidad cristiana primitiva

jueves, 5 de noviembre de 2009

El Cardenal Amigo Vallejo se va a Madrid. Juan José Asenjo, nuevo Arzobispo Titular de la Archidiócesis de Sevilla


El arzobispo coadjutor de Sevilla, monseñor Juan José Asenjo, se ha convertido hoy en el arzobispo titular de esta sede después de que el Papa Benedicto XVI aceptara hoy la renuncia del cardenal Carlos Amigo por razones de edad.

En su comparecencia ante los medios de comunicación Monseñor Amigo Vallejo ha felicitado a Juan José Asenjo «es para mí una satisfacción persona, que ocupe el nuevo cargo». En su despedida ha expresado su gratitud al Santo Padre Pablo VI que lo nombró arzobispo y a todos los Santos Padres, así como a la Archidiócesis. Para él es «una etapa que ha terminado pero que comienza de nuevo».
En su primera intervención como arzobispo Monseñor Asenjo explicó que se ponía en ejecución a primeros de septiembre la renuncia del cardenal, «dejándonos libertad para elegir la fecha de la aceptación» y que es una fecha de común acuerdo y que coincide con aniversario de la beatificación de Sor Ángela de la Cruz.
Asenjo según resaltó él mismo viene a «adecentar el legado que se me entrega», «vengo a poner mi granito de arena a Sevilla». Por otra parte resaltó que la de Sevilla «es un Archidiócesis que está en marcha -por lo que no vengo a inventar nada, está todo inventado».
Monseñor Carlos Amigo Vallejo, cardenal arzobispo de Sevilla, celebró ayer su onomástica. Como cada año desde que ejerce el Pontificado en esta Diócesis, recibió en el Palacio Arzobispal a instituciones, congregaciones religiosas y personas que quisieron acudir a felicitarlo en el día de su santo.


Un día muy especial, toda vez que es la primera vez que sucede desde que, como es preceptivo, presentase su renuncia al Santo Padre al cumplir los 75 años. Pero a nadie escapa que la cuenta atrás la ha echado ya el propio monseñor Amigo, hombre inteligente donde los haya. Por eso sabía ayer perfectamente que los rumores sobre su sucesión —que han ido in crescendo desde que fue nombrado arzobispo coadjutor monseñor Juan José Asenjo Pelegrina— se dispararon en corrillos a la salida del Palacio Arzobispal. Que si la inminencia del nombramiento del nuevo obispo de Córdoba —para quien suena el obispo de Tarazona—, que si cartas que podrían haber llegado ya... nada le coge de nuevas al prelado, que continúa con su agenda, demostrando un día sí y otro también que cuando tenga que ser, será.

Y si el día de ayer fue especial, hoy también lo es. Se cumple el 27 aniversario de la beatificación de Sor Ángela de la Cruz, por la que el cardenal siente verdadera devoción. Un día perfecto para cualquier anuncio que suponga júbilo para los fieles, para la Diócesis, para el propio monseñor Amigo.

Por ello no es de extrañar que las miradas, y los sentidos, estén puestos en la hora del Ángelus. ¿Sonarán hoy las campanas? ¿O será, quizá, mañana? ¿Y si tardan en sonar? Santa Ángela sigue velando desde arriba. Si las campanas anuncian júbilo, seguro que Madre Angelita se alegra por todos...

FUENTE: www.pasionensevilla.tv

martes, 3 de noviembre de 2009

"Yo soy la Resurrección y la Vida"

En aquel tiempo, las hermanas de Lázaro mandaron recado a Jesús, diciendo: -«Señor, tu amigo está enfermo.» Jesús, al oírlo, dijo: -«Esta enfermedad no acabará en la muerte, sino que servirá para la gloria de Dios, para que el Hijo de Dios sea glorificado por ella.» Jesús amaba a Marta, a su hermana y a Lázaro. Cuando se enteró de que estaba enfermo, se quedó todavía dos días en donde estaba. Sólo entonces dice a sus discípulos: -«Vamos otra vez a Judea.» Cuando Jesús llegó, Lázaro llevaba ya cuatro días enterrado. Cuando Marta se enteró de que llegaba Jesús, salió a su encuentro, mientras María se quedaba en casa. Y dijo Marta a Jesús; ” -«Señor, si hubieras estado aquí no habría muerto mi hermano. Pero aún ahora sé que todo lo que pidas a Dios, Dios te lo concederá.» Jesús le dijo: -«Tu hermano resucitará.» Marta respondió: -«Sé que resucitará en la resurrección del último día.» Jesús le dice: -«Yo soy la resurrección y la vida: el que cree en mí, aunque haya muerto, vivirá; y el que está vivo y cree en mí, no morirá para siempre. ¿Crees esto?» Ella le contestó: -«Sí, Señor: yo creo que tú eres el Mesías, el Hijo de Dios, el que tenía que venir al mundo.» Jesús sollozó y, muy conmovido, preguntó: -«¿Dónde lo habéis enterrado?» Le contestaron: -«Señor, ven a verlo.» Jesús se echó a llorar. Los judíos comentaban: -«¡Cómo lo quería!» Pero algunos dijeron: -«Y uno que le ha abierto los ojos a un ciego, ¿no podía haber impedido que muriera éste?» Jesús, sollozando de nuevo, llega al sepulcro. Era una cavidad cubierta con una losa. Dice Jesús: -«Quitad la losa.» Marta, la hermana del muerto, le dice: -«Señor, ya huele mal, porque lleva cuatro días.» Jesús le dice: -«¿No te he dicho que si crees verás la gloria de Dios?» Entonces quitaron la losa. Jesús, levantando los ojos a lo alto, dijo: -«Padre, te doy gracias porque me has escuchado; yo sé que tú me escuchas siempre; pero lo digo por la gente que me rodea, para que crean que tú me has enviado.» Y dicho esto, gritó con voz potente: -«Lázaro, ven afuera.» El muerto salió, los pies y las manos atados con vendas, y la cara envuelta en un sudario. Jesús les dijo: -«Desatadlo y dejadlo andar.» Y muchos judíos que habían venido a casa de María, al ver lo que había hecho Jesús, creyeron en él.

viernes, 30 de octubre de 2009

"La Vida de María" Capítulo 1º

Comenzamos con un serial dedicado a la vida de la Madre de Jesucristo, María. En diferentes capítulos vamos a ir desarrollando los aspectos más importantes de una de las figuras más destacadas del Cristianismo, como es la madre de Dios.

En este primer capítulo versaremos sobre el nombre de María. Su procedencia y sus diferentes aspectos destacados.

CAPITULO PRIMERO: EL NOMBRE DE MARIA.

Para los hebreos el nombre no era un simple apelativo, estaba íntimamente ligado a la persona, por ello usaban nombres que describirían la personalidad, el carácter, así es muy usada la expresión "su nombre será tal" cuando se quería designar una misión o carácter especial al niño por nacer.
María es un nombre conocido en el
Tanaj o Antiguo Testamento por haber sido nombre de la hermana de Moisés y Aarón, originalmente escrito como Miryām, la versión de los Setenta lo menciona como Mariám (Mαριαμ), el cambio en la primera vocal señala tal vez la pronunciación corriente, la del arameo, que se hablaba en Palestina antes del nacimiento de Cristo. Al igual que con los nombres de Moisés y Aarón, que fueron tomados con sumo respeto, el de María no se usó más como nombre común, pero la actitud cambió con el tiempo y fueron puestos como señal de esperanza por la era mesiánica. En el texto griego del Nuevo Testamento, en la versión de los Setenta, el nombre usado era Mariám. María sería probablemente la forma helenizada de la palabra.
Aunque en la
Edad Media se le buscó significados más piadosos que exactos, bajo los actuales descubrimientos arqueológicos, "Alteza" o "Ensalzada" son los significados más cercanos al nombre de origen hebreo.
María es asimismo conocida como
"Estrella de los Mares" o "Estrella del Mar" (Stella Maris). Dicho nombre procede de la interpretación de un pasaje del Antiguo Testamento, primer libro de los Reyes, 18:41-45.

domingo, 25 de octubre de 2009

Sol y buen tiempo en un fin de semana en torno a Nuestra Patrona

Con el buen tiempo que ha hecho durante todo el fin de semana se han visto engrandecidos los actos que nuestra Hermandad ha celebrado junto a Nuestra Patrona en su Santuario.

Por un lado, el sábado 24 se celebró con éxito y buen ambiente el "Dia de Campo" que nuestra Hermandad organizó para celebrar con la Cuadrilla de Costaleros de Nuestra Patrona. Un nutrido grupo de Costaleros de la Santísima Virgen estuvieron durante todo el día junto a Nuestra Patrona, compartiendo vivencias y disfrutando de una magnífica jornada en convivencia y hermandad.

Y por otra parte, en la jornada del domingo 25 se celebró la mensual misa en el Santuario. El mismo estaba a rebosar de hermanos y devotos de Nuestra Patrona, y muy especialmente, un nutrido grupo de hermanos de la Hermandad de Santa María del Alcor Coronada, Patrona de El Viso del Alcor, que asistieron al Santuario a contemplar a Nuestra Patrona y participar de la Eucaristía que presidió, por vez primera, nuestro párroco Don Juan Carlos de la Rosa Egea. Los hermanos de El Viso ofrecieron un ramo de flores a Nuestra Patrona y obsequiaron a Nuestra Hermandad con un cuadro de la Santísima Virgen Santa María del Alcor Coronada, que ya ha sido colocado en el salón del Santuario de Nuestra Señora de Guaditoca. Tras la Santa Misa, los mismos disfrutaron de una jornada campera en el inigualable marco de la Vega del Encinal, donde se encuentra el Santuario de Nuestra Patrona. Asistió la Junta de Gobierno de nuestra Hermandad, que fueron invitados a compartir mesa con los hermanos de El Viso del Alcor. Pasada esta jornada, visitaron en la tarde del domingo la Parroquia de Santa María de la Asunción, teniendo como guía a nuestro Párroco Don Juan Carlos de la Rosa.

Sin duda hemos disfrutado de un magnífico último fin de semana del mes de Octubre en el que una vez más nuestro pueblo ha demostrado el filial amor que profesa a Nuestra Patrona.

viernes, 23 de octubre de 2009

Santa Misa en el Santuario

Comenzamos, como cada último domingo de mes, el próximo 25 de Octubre con el ciclo de misas que durante todo el tiempo que Nuestra Patrona se encuentra en el Santuario se celebran en el mismo para que todos sus hijos acudamos a Ella una vez cada mes.

Así el próximo domingo, 25 de Octubre, a las 12.30 de la mañana se celebrará Santa Misa en el Santuario de Nuestra Señora de Guaditoca. Se ruega a los hermanos y devotos tengan en cuenta que el próximo domingo se cambia la hora. Se atrasa una hora el reloj. Por tanto, es un dato a tener en cuenta para asistir a la Santa Misa, aunque, en el peor de los casos y si se equivocan, será un honor estar una hora antes en el Santuario de Nuestra Patrona contemplándola y rezando ante su Imagen.

Cabe destacar que será el primer acto de Nuestra Hermandad que presida nuestro párroco y futuro director espiritual Don Juan Carlos de la Rosa Egea.

miércoles, 21 de octubre de 2009

"Dia de campo"

Este próximo sábado, como ya se anunciara en esta página web, se celebrará un "Dia de Campo" con todos los hermanos costaleros de Nuestra Señora de Guaditoca, en agradecimiento por la labor que durante todo el año realizan en favor de nuestra Hermandad, especialmente para el lucimiento procesional de Nuestra Patrona por las calles de nuestro pueblo en las cuatro ocasiones que realiza durante el período de cinco meses que esta en Guadalcanal.

La jornada de convivencia tendrá lugar a partir de la 1 de la tarde, en los aledaños del Santuario de Nuestra Señora de Guaditoca. Consistirá en compartir vivencias y opiniones sobre nuestros costaleros y sobre nuestra Hermandad, por tanto se trata de un día de confraternidad en el que tendremos oportunidad de expresar nuestra gratitud a este grupo de hermanos que con tanto esfuerzo y esmero realizan todos los años su labor bajo las trabajaderas.

Se servirá un almuerzo campero para todos los asistentes a este acto en la caseta del recinto.

domingo, 18 de octubre de 2009

CAPÍTULO V (2ª Parte)

“D. Felipe, por la gracia de Dios, Rey de Castilla, de León…. Administrador perpetuo de la Orden y Caballería de Santiago por autoridad apostólica.

Por cuanto y por parte de vos D. Alonso de Ortega y Ponce de León y Toledo, caballero de la dicha orden, vecino de la Villa de Guadalcanal, se me hizo relación que D. Alonso Carranco de Ortega, vuestro segundo abuelo, había labrado a su costa una ermita a Nuestra Sra. de Guaditoca, en el sitio del Encinal, término de dicha Villa para trasladar a ella a su Divina Magestad, por ser la que tenía corta y indecente; con licencia que para ello obtuvo del licenciado D. Francisco Caballero de Yegros, Religioso de la referida orden, siendo Vicario general de la Provincia de León, que original presentábades; y que después por parte de don Pedro de Ortega Freire, vuestro abuelo, se solicitó ante el licenciado D. Tirso Gutiérrez de Lozano, Vicario general que así mismo fue de dicha Provincia de León, no se le desembarazase el uso de una puerta que de dicha ermita entraba a una casa contigua a ella para efecto de su mayor asistencia y cuidado, lo que se le concedió y en esta forma el dicho D. Pedro Alonso Damián, vuestro padre y vos habíades estado cuidando del ornato y decencia de dicha ermita, habiendo conseguido un Jubileo para el mayor culto de dicha Sta. Imagen y asistencia de devotos, y que mediante ser vos, el dicho don Alonso segundo nieto del expresado D. Alonso Carranco de Ortega, que fue el que había labrado la referida ermita, como constaba de la información que también presentábades, me suplicásteis fuese servido declararos por Patrono de dicha ermita y que para que se os diese la posesión, mandaros dar el despacho necesario, cometido al Provisor de la Ciudad de Llerena, o al Vicario general de dicha provincia o como la mi Merced fuese, y visto en el mi Consejo de las Ordenes juntamente con la licencia e información citadas, y lo que en su razón se dijo por el fiscal, por Auto de 4 de Julio pasado de este presente año y entre otras cosas se acordó que el Vicario de la dicha Villa de Guadalcanal me informase del origen de esta Santa Imagen, antigüedad de la ermita y si estaba agregada a curato de dicha Villa, y para ello se dio despacho a nueve de dicho mes; y habiendo ejecutado dicho Vicario el expresado informe, por donde constó ser cierta vuestra relación de estar fabricada dicha ermita en tierras donde sucedió el dicho vuestro segundo abuelo D. Alonso Carranco de Ortega, la especial devoción de vuestra casa a dicha Santa Imagen, no estar agregada a curato alguno y otras cosas; visto el dicho informe, los antecedentes con que se juntó y lo que asimismo se dijo sobre todo por el dicho mi fiscal, por auto del dicho mi Consejo de veinte y siete de Agosto próximo pasado, fue acordado se os despache título de Administrador de dicha ermita para Vos y vuestros sucesores en nombre de dicha Orden; yo lo he tenido y tengo por bien y de dar para ello esta mi carta por la que, atendiendo a lo que va expresado y los servicios que habéis hecho a mí y a la dicha Orden y espero que haréis, os elijo y nombro por Administrador de dicha ermita de Nuestra Señora de Guaditoca, a vos dicho D. Alonso de Ortega Ponce de León, por todos los días y después de Vos a vuestros sucesores, en nombre de la dicha Orden de Santiago, y es mi voluntad que como tal cuidéis de la conservación, culto, decencia, servicio y ornato de la dicha ermita y Santa Imagen, y cualesquier bienes, efectos y limosnas, que en cualquier manera le pertenecieren y de la distribución de todo ello en lo que va referido, tomando cuentas a las personas que lo hubiesen tenido, o en adelante tuviesen a su cargo, cobrando los alcances y efectuando todo lo demás que sea conveniente y favorable a dicha ermita como tal Administrador, en nombre y por la representación de la dicha Orden, para todo lo cual y todo lo a ello anejo y dependiente os doy poder y comisión en forma, y que de todo lo que recibiéredes, cobráredes y distribuyéredes, tengáis libro de cuenta y razón, para que lo podáis dar a los mis visitadores de la dicha Orden o a cualquier que mandare cada y cuando os fuere pedida: y mando al Vicario general de dicha Provincia, Provisor de la ciudad de Llerena y Vicario de la dicha Villa de Guadalcanal, y al Consejo Justicias y Regimiento, Caballeros, Escuderos, Oficiales y hombres buenos de ella y a otras cualesquier personas, jueces y justicias, así eclesiástica como seculares, a quien lo aquí contenido toca o tocar puede cualquier manera os den y hagan dar la posesión, uso y ejercicio de la Administración de dicha ermita, en mi nombre y de la dicha Orden de Santiago, y os reciban, hayan y tengan como tal administrador en todas las cosas a dicho cargo anejas y pertenecientes, y os guarden y hagan guardar todas las honras, gracias, mercedes, franquezas, libertades, preeminencias, prorrogativas, y todas las otras cosas que debéis haber y gozar, y os deben ser guardados todo bien y cumplidamente sin que falta cosa alguna, y que en ello ni en parte de ello impedimento ni embarazo alguno no os pongan, ni consientan poner, que yo por la presente os recibo al ejercicio y uso de la dicha Administración, caso que por los susodichos o parte de ellos, a ella no seáis admitido y que os entreguen y haga entregar, por inventario y en forma todas las escripturas y papeles, bienes muebles y raíces, joyas, plata, vestidos, ornamentos, maravedies, vino, pan y todas las otras cosas que en cualesquier manera o por cualquier causa o razón tocasen o pertenecieren a dicha ermita; y es mi merced y voluntad que en la manera que dicha es, tengáis la dicha Administración para Vos en toda vuestra vida, y después de Vos a los sucesores en vuestra casa con calidad de que cada uno en su tiempo tenga obligación de sacar en su cabeza Título, y no de otra suerte, el que me le dará constando ser tal sucesor; de lo cual mandé dar y di esta mi carta sellada con el sello de la dicha Orden. En Balsain a 4 de Septiembre de mil setecientos veinte y dos años. = Yo el Rey = Yo D. Diego de Morales, secretario del Rey nuestro Señor, la hice escribir por su mandato.” (44)
Recibida la Real Cédula, tan honrosa para el Marqués de San Antonio, la presentó a la Villa en 20 de Octubre del mismo año y tomó posesión de la administración del Santuario, dándosela el Sr. D. Bartolomé Díaz, Juez eclesiástico ordinario de la Villa, en presencia de los testigos D. Juan de Ortega, don Juan Pérez Carrasco y Salvador Sánchez, vecinos de Guadalcanal, dando fe el notario Manuel José del Castillo, en 10 de Noviembre de 1722.
Un cambio fundamental se obró en el régimen del Santuario de Nuestra Patrona; sin en los primeros años, y aún en otros posteriores, fue beneficioso al culto de la Santísima Virgen el reconocimiento del Patronato en la familia de los Ortegas, a la larga fue perjudicial; y lo que, tal vez con la más pura y recta de las intenciones y con deseo sincero y positivo de aumentar el culto y devoción a la Virgen de Guaditoca, se esforzó en conseguir D. Alonso Ortega Toledo, al llegar el siglo XIX, dio origen a disgustos graves, perdiéndose cuanto reunió la piedad de los fieles.

jueves, 15 de octubre de 2009

"Madre de Madres"

Ofrecemos un archivo encontrado en la página www.youtube.com, que hace referencia a Nuestra Señora de Guaditoca. El archivo es un montaje fotográfico con imágenes de Nuestra Patrona, teniendo como fondo principal una de las mas bellas plegarias que se han compuesto para Ella, curiosamente por nuestro hermano y Alcalde de Guadalcanal Don Jesús Manuel Martínez Nogales.

Esperemos que sea del agrado de todos. Si quieren visualizarla pulsen el siguiente link:

http://www.youtube.com/watch?v=ar-N8DoQYWQ

martes, 13 de octubre de 2009

Convivencia anual de la Hermandad de Las Tres Horas

Este sábado, 17 de octubre, tendrá lugar la tradicional convivencia de la Hermandad de las Tres Horas en el Santuario de Nuestra Señora de Guaditoca de Guadalcanal. Se trata de un acto tradicional celebrado anualmente en torno a Nuestra Patrona, en el que la citada Hermandad desarrolla sendas actividades encaminadas a pasar un dia de convivencia entre Hermanos y Hermanas, teniendo como marco incomparable el entorno de Nuestro Santuario, en el que celebrarán una Eucaristía a partir de las 12.30 de la mañana como inicio de esta jornada de convivencia en Hermandad.

Es para nosotros un honor contar con actos como este en Presencia de Nuestra Señora de Guaditoca, por lo que agradecemos a la Hermandad de las Tres Horas el que todos los años celebre esta jornada de convivencia en torno a Nuestra Patrona, así como trasladamos esta iniciativa al resto de colectivos de nuestro pueblo, ya que actos como este hacen que todos nos sintamos mas cercanos a la Patrona de Guadalcanal en estos meses de ausencia de nuestro pueblo.

miércoles, 7 de octubre de 2009

"DIA DE CAMPO" (Convivencia de Costaleros)

El próximo sábado 24 de Octubre de 2009 se va a celebrar en los aledaños del Santuario de Nuestra Señora de Guaditoca una convivencia de hermanos costaleros en un llamado "DIA DE CAMPO" en el que compartiremos sensaciones e impresiones con la Cuadrilla de Costaleros de Nuestra Señora de Guaditoca en un acto de agradecimiento por la enorme labor que realiza este grupo de hermanos para engrandecer el nombre de Nuestra Patrona en todas las fiestas que se celebran en Su Honor.

Iremos dando detalles de esta jornada de confraternidad a medida que se vaya acercando la fecha de su celebración.

lunes, 5 de octubre de 2009

D. JUAN CARLOS DE LA ROSA EGEA, NUEVO PÁRROCO DE GUADALCANAL

Desde la tarde del pasado domingo día 4 de Octubre, nuestro pueblo tiene nuevo párroco, tras la toma de posesión de Don Juan Carlos De la Rosa Egea como párroco de Santa María de la Asunción, Santa Ana y San Sebastián, las tres parroquias con las que cuenta nuestro pueblo, aunque sea la única sede la Iglesia Parroquial de Santa María de la Asunción.

El acto estuvo presidido por el Vicario Episcopal de la Zona Norte, Don Jesús Donaire Domínguez y otros seis sacerdotes más. Acompañó con sus cantos el Coro de la Inmaculada Concepción, formado por niños de nuestra Comunidad Parroquial y dirigido por n.h. Doña Maria Dolores Llano Moyano y por n.h. Doña Purificación Muñoz Criado.

Tras el acto, que contó con la presencia de todos los grupos parroquiales de nuestro pueblo, entre ellos todas nuestras Hermandades, se sirvió un ágape de bienvenida en la Casa de la Cultura de nuestro pueblo. El nuevo párroco tuvo ocasión de mantener una primera toma de contacto con todos nuestros feligreses, aunque sea a partir del día de hoy cuando tome contacto real con todos los habitantes de nuestro pueblo.

Según le hizo saber a Nuestro Hermano Mayor, no será muy tarde cuando se acerque al Santuario de Nuestra Señora de Guaditoca a orar ante Nuestra Patrona. A Ella encomendamos la labor de este nuevo pastor que desde hoy rige los pasos de nuestra Comunidad Parroquial.

jueves, 1 de octubre de 2009

Toma de posesión del nuevo párroco de Guadalcanal

El próximo domingo 4 de Octubre de 2009, Festividad litúrgica de San Francisco de Asís, tendrá lugar a las 20.30 horas de la tarde la Toma de Posesión del Nuevo Párroco de Guadalcanal, Don Juan Carlos de la Rosa.

Al acto han sido invitadas todas las personas de nuestro pueblo, y tras el mismo se servirá un ágape de bienvenida en la Casa de la Cultura y Juventud de nuestro pueblo. Asimismo, todas las Hermandades Locales, entre ellas la nuestra, han sido invitadas para recibir al nuevo párroco, que tomará posesión en una ceremonia que, previsiblemente, estará presidida por el Rvdo. Sr. Don Jesús Donaire Domínguez, Vicario Episcopal de la Zona Norte, que ya estuviera en nuestro pueblo presidiendo la Función Conmemorativa de la Onomástica de Nuestra Señora de Guaditoca el pasado 6 de Septiembre.

Desde aquí hacemos extensiva la invitación para todos nuestros hermanos y devotos a dar la bienvenida a nuestro nuevo párroco.

martes, 29 de septiembre de 2009

GALERÍA DEL CAMINO I

Ofrecemos estas imágenes del Camino de la Romería de Septiembre de 2009, enviadas por nuestra hermana y diputada de juventud Dña. Maria del Carmen Moreno Díaz.














lunes, 28 de septiembre de 2009

"Solitaria se queda"

Siguiendo con las plegarias dedicadas a Nuestra Patrona, es momento de atender al título de la plegaria "Solitaria se queda" para englobar lo vivido el pasado fin de semana junto a Nuestra Señora de Guaditoca.


Atrás quedó la procesión solemne del viernes, cuando aproximadamente a las 11 de la noche Nuestra Patrona entraba en la Capilla conventual del Espíritu Santo. Nada más llegar fue engalanada con sus atributos de Pastora. Así aparecía a las 12 en punto de la noche en su nuevo Templete de Plata, vestida con sus Galas de Pastora para el rezo del Santo Rosario Cantado. Lucía la Señora el traje de Pastora rojo complementado con la antigua capa bordada en hilos de oro sobre tisú beige. Su pamela adornada por nardos y romero. Y presidiendo el altar mayor de la Capilla Conventual dio comienzo el rezo del Santo Rosario, acompañado por los cantos del Coro Romero "Nuestra Señora de Guaditoca".

Una vez finalizado este culto anual de Regla se procedió a la intensa noche de vela de los devotos de la Señora. Como siempre, emotiva y especial en esta su última noche en nuestro pueblo, rodeada de las personas que siempre le acompañan, tanto a su llegada a Guadalcanal como antes de su partida en Septiembre. Y casi sin darnos cuenta, entre rezos de plegarias a la Santísima Virgen, nos sorprendió a duerme vela el estallido del primer cohete que anunciaba la hora del adiós.


A las 8 en punto de la mañana y tras un alegre repicar de campanas del convento, hacía su salida por la puerta principal La Señora, entronizada en su nuevo templete de plata, el cual, al ser un nuevo enser dio algún que otro problema al inicio del camino hasta que los romeros que llevaron a Nuestra Patrona a su Santuario se cuadraron y adaptaron para ir lo más cómodos posible en el camino que nos llevó hasta su Ermita. Fue subsanado a la mayor brevedad posible gracias a la buena colaboración de todos los romeros que portaron a la Santísima Virgen durante todo el Camino.


A las doce y diez minutos de la mañana llegaba a la explanada del Santuario la Santísima Virgen, acompañada por los cantos de los romeros y entre el clamor y las palmas de todos los presentes. Los romeros que la portaban la fueron meciendo al compás de las sevillanas que cantaban, hasta llegar a la Cruz de la Aparición en donde se entonó la última salve antes de entrar en la Ermita. Finalizada la salve de nuevo las sevillanas y los vivas, y las mecidas hasta llegar a la Puerta del Santuario, en donde se despidieron de Ella los Romeros a Caballo, que portaron su Simpecado desde el pueblo hasta la Ermita. Tras la ofrenda de flores de los romeros a caballo de menor edad, las lágrimas de los devotos y los vivas, la Santísima Virgen hizo su entrada en el Santuario en torno a las 12.25 de la mañana, tras la cual, quedó entronizada en su Altar Mayor.

Pasados unos quince minutos dio comienzo la Santa Misa de Romeros, presidida por el Párroco de El Pedroso y cantada por el Coro Romero. Fue el último acto que se celebró en su Honor. A partir de ahí comenzaba la despedida de su pueblo que pasó durante toda la tarde a Venerarla. Ambiente festivo en el exterior del Santuario y muy emotivo en el interior, en una jornada de romería en la que, a Dios Gracias, no llovió, pese a la amenaza de unas cuantas gotas caídas durante la tarde. Llegada la medianoche, con algunos romeros aún en torno al Santuario, se cerraron las puertas de la Ermita y quedó Sola. Ahora empieza la cuenta atrás para una nueva primavera. Solo nos queda ir a verla cada vez que podamos. A buen seguro nos estará esperando en su Camarín, desde donde nos protege y bendice todos los días del año.

viernes, 25 de septiembre de 2009

"Desde la lejanía" (ANÓNIMO)

Hoy Señora, subes a tu capilla conventual, donde tu hijos nos despedimos de Ti.
Tenerlos toda la noche en la adormecida de la plegaria, tiene que ser para Ti satisfactorio, -¿por que quien puede dejar de acercarse a contemplarte?-, ya entronizada en tu flamante templete de plata, y dedicarte esa última Salve. Tú, Madre reconocerás a todos y cada uno de los que por allí pasen, y aun sin oír lo que te van a decir, sabrás qué te van a pedir o agradecer.
Se que Tú no tienes la culpa, pero este año te voy a faltar. Espero de tu comprensión sin medida, y de tu Refugio y Consuelo. Pero este año mi corazón solo podrá estar contigo desde la lejanía, las cosas son como El Padre Celestial las dispone.
-¡Que te voy yo a explicar de eso!-
Que tuviste a tu hijo, colgado de la Cruz, siendo Él mismo, Dios.
Mañana desde que salgas con tus Romeros hasta que llegues a tu Santuario, solo te pido que me des fuerzas para ir desgranando los misterios de tu Santo Rosario, y cuando tu Coro entone la Salve ya en tu Camarín, venerada por todos los que te contemplen, concédeme seguir amándote y la salud necesaria para el año que viene estar a tus plantas como un romero más entre la multitud.
¡¡¡Viva la Madre de Dios¡¡¡

Un hermano cualquiera.

jueves, 24 de septiembre de 2009

"Señora dentro de poco saldrás..."

Así comienza una canción dedicada a Nuestra Madre por el Coro que lleva Su Nombre: "Señora dentro de poco saldrás presumiendo entre varales, y como una paloma blanca florecerás entre los verdes trigales, Guaditoca....". Y así comenzamos esta entrada de blog dedicada a la fiesta que vamos a celebrar este fin de semana en Guadalcanal.

Ha llegado la hora del Adiós. Tras cinco meses en nuestro pueblo, Nuestra Señora de Guaditoca, Patrona de Guadalcanal partirá en Romería a las 8 de la mañana del Sábado 26 de Septiembre hacia su Santuario, que la custodiará como tesoro máximo que tenemos los guadalcanalenses durante los próximos siete meses.

Atrás han quedado los cinco meses que Nuestra Patrona tradicionalmente pasa en nuestro pueblo. Cinco meses en los que en ningún momento Nuestra Madre ha estado sola. Tantas y tantas mañanas de personas acudiendo en masas a ver a Su Patrona. Tantas tardes a la melodía del rosario. Tantos sábados de Ángelus a las 12 de la mañana. Tantas miradas de devoción de su Pueblo día tras día. Todo queda atrás, y en el recuerdo que nos dará fuerza hasta volverla a ver.

Pero todo ello es alegría. Alegría porque aún nos quedan muchos momentos por vivir antes de su partida. La procesión del viernes, el Rosario en la Iglesia del Espíritu Santo, la larga noche de las personas que velarán con Ella hasta que llegue el nuevo día. Y por supuesto la Romería, en la que a buen seguro su Santuario permanecerá lleno de fieles durante todo el día para despedirse de Ella.

Y nos queda la tranquilidad. La tranquilidad de que al partir de su Santuario Ella siempre estará con nosotros. Siempre en nuestro corazón y siempre velando por su pueblo que la quiere y la venera como nadie. Nos queda la tranquilidad de saber que cada vez que vayamos a Verla nos estará esperando. Siempre en su Camarín, desde donde bendice a toda la Serranía y la Campiña extremeña. Reinando sobre nuestro pueblo y sobre nuestra gente. Nos esperará siempre, y como prosigue la canción, cuando llegue la tarde de abril que tanto nos gusta y que nos la devolverá a nuestro pueblo, proseguiremos cantando "... porque llegó ya el día que yo esperaba".
Que así sea.

martes, 22 de septiembre de 2009

El Beso del Adiós

Tras la Solemne Función Principal de Instituto, llegó la tarde del Domingo el Besamanos que a la Santísima Virgen de Guaditoca se le consagra como último culto en nuestro pueblo. La Sagrada Imagen de la Patrona de Guadalcanal se encontraba en el Altar Mayor de la Parroquia de Santa María de la Asunción, ante un altar inmaculista que la envolvía sin mas lujos para destacar sólo su Bella Imagen, vestida para la ocasión con saya celeste y manto blanco, y luciendo la antiquísima corona de oro de Manuel Seco Velasco. Sirvió este culto para la irremediable despedida de todo su pueblo, que desde las 7 de la tarde pasó a Venerarla entre rezos del Rosario y repiques de campanas que culminaron con la Solemne Eucaristía presidida en esta ocasión por el Párroco de El Pedroso y Arcipreste de la Sierra Norte de la Archidiócesis de Sevilla.





Ahora sólo nos queda esperar que llegue el día del adiós. Mientras tanto ofrecemos esta galería de imágenes tomadas por n.h. Don Jose Miguel García Gálvez, al que desde aquí agradecemos la colaboración para el mantenimiento gráfico de esta página web.





lunes, 21 de septiembre de 2009

Solemnísima Función Principal de Instituto


En la tarde del pasado sábado tuvo lugar la Solemne Función Principal de Instituto de nuestra Hermandad, como culmen de la Novena en honor a Nuestra Señora de Guaditoca, Patrona de Guadalcanal, que se ha venido celebrando durante los útlimos días. En la misma, presidida por D. Jose Manuel Martínez Guisasola, tuvo lugar la anual profesión de fe de nuestra Hermandad, y estuvo cantada por el Coro Romero "Nuestra Señora de Guaditoca". Fue un acto solemne en el que, literalmente, no cabia un alfiler, ya que contamos con una Parroquia llena a rebosar en este último Culto de Regla anual que se consagra a Nuestra Patrona en la estancia que la Santísima Virgen permanece en nuestro Pueblo.

Ofrecemos sendas imágenes tomadas por n.h. D. Jose Miguel García Gálvez.

viernes, 18 de septiembre de 2009

Culminan este fin de semana los cultos a Nuestra Patrona

Este fin de semana finalizan los cultos anuales que se celebran en honor a Nuestra Señora de Guaditoca, Patrona de Guadalcanal, en nuestro pueblo.

El sábado 19 de Septiembre a las 20.00 horas tendrá lugar la Solemne Función Principal de Instituto, presidida por Don Jose Manuel Martínez Guisasola, Pbro., que ha sido el sacerdote que nos ha acompañado durante todos los días de la novena. Finalmente, no será el Cardenal de Sevilla quien nos predique en dicha Función, al no poder asistir por motivos de agenda a nuestro pueblo. En el trascurso de la misma tendrá lugar la Solemne y Pública Protestación de Fe de nuestra Hermandad.

El domingo 20 de Septiembre, a partir de las 19.00 horas, Nuestra Señora de Guaditoca permanecerá expuesta en Devoto Besamanos tras el rezo del Santo Rosario. Será por tanto el último acto de Culto que se celebre en Su Honor en nuestro pueblo. Lo siguiente, la Romería. El próximo fin de semana.

Esperamos la asistencia de todos nuestros hermanos y devotos a estos últimos cultos que celebraremos en Honor a Nuestra Patrona.